La nueva Teoría Evolutiva del Lenguaje consiste en poder considerar al lenguaje como un ser vivo, que tiene su propia inteligencia. Como un ser puro, neutro, que no juega ni a favor ni en contra de nadie, puede ser utilizado tanto por la consciencia, como por la inconsciencia. El primer punto, de esta Teoría, es que, no podemos comprender, vivir ni experimentar nada, que no esté previamente cargado o activo en el lenguaje.